Una Sociedad Limitada (SL) es una de las diferentes formas jurídicas bajo las cuales pueden constituirse las empresas. También puede ser llamada Sociedad de Responsabilidad Limitada o SRL. Se le denomina de esta forma porque limita la responsabilidad de los emprendedores a la cantidad aportada.

A diferencia de otras formas jurídicas, como la Sociedad Anónima, no hace falta garantizar el pago de gastos y compromisos con los acreedores con derechos de patrimonio propios. Además, no hace falta que existan muchos socios para constituir un negocio con esta estructura legal. De hecho, hay fórmulas de un solo emprendedor también conocidas como empresas unipersonales.

El capital social es la aportación mínima obligada por la ley que todo socio capitalista de una sociedad de responsabilidad limitada debe realizar para la constitución de la empresa como tal. Una vez obtenido el certificado del nombre de tu negocio, podrás acudir al banco para abrir una cuenta a nombre de tu empresa en la que ingresar el capital requerido. No existe un límite máximo de euros y su valor mínimo solía ser de 3000 euros, aunque con la nueva ley “Crea y Crece” se puede crear una SL a partir de 1 euro.

Debes hacer el ingreso de forma íntegra en una cuenta de empresa asociada a tu negocio. Cuando banco haya obtenido el capital social mínimo, obtendrás un certificado con el que deberás acudir a la notaría. Una vez presentes tu alta en Hacienda y las escrituras de la empresa, podrás utilizar el capital social invertido y, si quieres, utilizarlo para tus negocios.

Tienes que tener en cuenta que no en todas las sociedades es necesario aportar un monto social mínimo. Aunque, en el caso de la Sociedad Limitada de Formación Sucesiva, por ejemplo, no existen mínimos legales.

CIRCE. Cuando fundes tu empresa, esta estará compuesta por el nombre completo del dueño o uno de los compañeros del negocio y un código alfanumérico que irá seguido por las siglas SL (Sociedad Limitada). A este código se le llama CIRCE, y con él facilitaremos el proceso de obtención de la denominación social de forma totalmente online.

DUE. Para la constitución de los negocios online es necesario rellenar un formulario: el Documento Único Electrónico (DUE). Si te informas bien, tú mismo puedes completar el proceso a través de la red. Aun así, si quieres más ayuda, siempre puedes dirigirte a un Punto de Atención al Emprendedor (PAE), donde se encargarán de poner en marcha la creación de tu Sociedad Limitada. Recuerda que también puedes crear una SL online con Holdmin y te ayudamos con todo el proceso a la hora de montar tu negocio a través de internet.

Acta Notarial. Este será el trámite más importante de todos, ya que sin el Acta Notarial los hechos no constarán y no podrás acometer la fundación de tu empresa. Una vez completado el DUE, lo único que queda es acudir a la cita con el notario pertinente para aportar dos documentos: el certificado de aporte de capital social y la Certificación Negativa de la denominación social obtenida previamente. Para las sociedades con un capital social no mayor a 3.100 euros, se aplicarán los aranceles registrales y notariales que establece el Real Decreto Ley 13/2010.

Si eres emprendedor y estás pensando en montar tu Sociedad Limitada en España, es probable que estés preguntándote por los trámites que tienes que realizar y si implican demasiado papeleo o tediosas visitas a diversas instituciones. Pero lo cierto es que puedes crear tu Sociedad Limitada de forma totalmente online, evitando así desplazarte para abrir tu cuenta de nueva empresa o para depositar el capital social. La visita ante notario también la puedes hacer en linea gracias al Portal Notarial del Ciudadano. De hecho, si decides realizar el proceso en línea, lo podrás completar en tres o cuatro días.

Para crear una SL a través de internet, tendrás que acudir al sitio web adecuado y completar los siguientes pasos:

1. Determina la forma jurídica de tu empresa y elige si será una Sociedad Limitada, una Sociedad Anónima o una Cooperativa.

2. Obtén la Certificación Negativa a través del Registro Mercantil Central para acreditar que no existe ninguna otra sociedad que lleve el mismo nombre de tu negocio.

3. Deposita el capital social en una cuenta a nombre de tu empresa.

4. Obtén el NIF o Número de Identificación Fiscal a través de la Agencia Tributaria. Tienes que presentar el modelo 036, una copia de los estatutos y la escritura de constitución. Con todo esto, obtendrás un NIF provisional con el que podrás operar hasta que, como máximo seis meses después, te sea concedido el NIF definitivo.

5. Crea la sociedad ante notario. Todos los socios del negocio deberán firmar la escritura pública.

6. Inscribe la empresa en el Registro Mercantil Provincial pertinente para obtener la competencia jurídica.

7. Solicita el alta en el IAE (Impuesto sobre Actividades Económicas) en la Agencia Tributaria y deja constancia de la actividad empresarial de tu negocio.

8. Legaliza en el Registro Mercantil Provincial los libros de sociedades como el libro diario, el libro de cuentas anuales y el libro de inventarios.

9. Registra los signos distintivos de tu empresa (frases, imágenes, símbolos o palabras) en la Oficina Española de Patentes y Marcas.

Además de los pasos legales imprescindibles a la hora de crear una empresa en internet, también tienes que tener en cuenta todo un conjunto de pasos (más allá de lo legal) que no puedes pasar por alto. Son los siguientes:

1. Estudio de mercado y estrategia de marketing. Para empezar, es necesario conocer las fortalezas y debilidades del nicho al que perteneces y, una vez analizada la competencia de tu negocio, crear un plan de marketing y publicidad que te haga destacar más.

2. Planificación de la presencia en internet: elige un dominio (puedes encontrarlos gratis, aunque no es algo recomendable si pretendes crear un negocio serio), contrata un hosting y crea un sitio web que sea seductor a la hora de atraer a los clientes potenciales de tu nicho de mercado. Estructura tu estrategia de marketing digital. Es importante crear tu tienda online si lo que quieres es vender tus productos o servicios de forma digital. Siempre puedes recurrir a herramientas como Shopify para simplificar esta parte del proceso en lo que a eCommerce se refiere.

3. Creación de una marca personal que identifique a tu empresa y que la diferencie de la competencia. Reflexiona sobre cómo te puedes vender en internet para generar ingresos de la forma más rápida posible.

4. Atención al cliente. Monitoriza todo cuanto dicen los usuarios y aprende a ponerte en su piel entendiendo sus necesidades, incluso si tu negocio no consiste en vender a través de una tienda digital. Debes crear una buena base de datos de los clientes para avisarles de novedades, eventos, ofertas o descuentos de tu eCommerce.

5. Formación y actualización de conocimientos. La mejor forma de destacar entre los negocios de la competencia, seas una tienda online o cualquier otro negocio, es no estancarse y adaptarse a las nuevas corrientes renovando constantemente las habilidades de los trabajadores de tu empresa.

Queremos que cuentes con la mejor protección desde el primer momento de vida de tu empresa. Por eso, desde Holdmin nos hemos asociado con Runbrokerseguros para ofrecerte el seguro de startup más completo en España.

Este producto está dirigido a empresas de reciente creación y tiene por objeto cubrir la responsabilidad civil en la que puedan incurrir como consecuencia de la actividad desarrollada y asegurada. El paquete de coberturas incluye:

Responsabilidad Civil:

RC General: Reclamaciones por daños causados a un tercero al desarrollar tu actividad, hasta 100.000 €.
RC Producto: Reclamaciones por daños causados a un tercero, por un error o defecto en uno de los productos que comercializas. Te indemnizamos hasta 100 000 €.
RC Profesional: Reclamaciones de tus clientes en caso de sufrir una pérdida financiera por un mal asesoramiento. Te indemnizamos con hasta 25 000 €.
RC LOPD: Reclamaciones de terceros en caso de incumplimiento involuntario de la Ley de Protección de Datos hasta 100 000 €.

Sanciones LOPD: En caso de multa por incumplimiento involuntario de la Ley de Protección de Datos, la compañía te indemniza por esta primera sanción, hasta 60 000 €.

R.C. por ataque de virus informáticos: Reclamaciones que puedan llegarte en caso de que dañes con un virus un programa informático de un tercero. Te indemnizamos con hasta 6.000 €